Cuando tenia tan solo 5 años a Jacinta le enseñaron a recolectar y armar las fichas de los rompecabezas, su hermana también le contó que las fuerzas del orden legal o ilegal, pedófilos aberrados y fetichistas pagan muy bien por un solo calzón y entre mas sucio y usado esté mucho mejor, por esta razón su pasatiempo es organizar las fichas para que de esta forma los familiares de los rompecabezas puedan vender las prendas y con ese dinero enterrarlos como deseen, en medio de esta situación tan absurda Jacinta reflexiona sobre la necesidad del progreso y del poder en un país como éste, y se pregunta constantemente que significa vivir en un pais como este.
La historia de Jacinta, Rosita y Esperanza nos invitan a preguntarnos que estamos haciendo para contribuir a este pais, una conmemoracion escenica a nuestros muertos, y un llamado de alerta a la violencia de género.
Proyecto de: Centro García Márquez «el original»
Dirección: Fernanda Rodríguez Sánchez
Dramaturgia: Versión libre a partir de la obra «El rompecabezas de Jacinto» de Sebastián Uribe Tobón
Elenco: Fernanda Rodríguez Sánchez