Los mejores artistas del mundo cuentan su saber en una plataforma exclusiva

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Por Laura Ventura para www.lanacion.com.ar

En esta ocasión las luces no iluminarán a las estrellas de las marquesinas, los intérpretes cuyo rostro sale en las revistas, los artistas quienes cuentan con miles de seguidores en las redes sociales. Serán ellos, quienes crean espacios mágicos sobre los escenarios, quienes diseñan puestas y producciones, quienes estarán bajo el foco, quienes acapararán todas las miradas. Estos inmensos realizadores de prestigio internacional formarán parte en breve de un proyecto que se gestó con gran recelo y entusiasmo: Platform of Performing Arts POPA. Surge así un encuentro único en su especie, la primera biblioteca de legados artísticos.

Durante el estatismo obligado por el confinamiento a los productores argentinos Eloísa Cantón y Bruno Pedemonti, al frente de Pipa Produce, una factoría de éxitos (Toc Toc, Visitando al Sr. Green, La laguna dorada, Amadeus, Dios Mío, El padre, etc.), los invadían las mismas preguntas: ¿Qué estarían haciendo los grandes creadores escénicos del mundo? ¿Cómo estarían llevado a cabo la reclusión quienes respiran un arte colaborativo? ¿Quién conserva o dónde se conserva el caudal de su conocimiento? Escenógrafos, vestuaristas, iluminadores, stage managers, productores ejecutivos, sonidistas, personalidades destacadas de cada área de las artes escénicas comenzaron a dialogar con los impulsores de este proyecto con la idea de crear un museo digital de conocimiento. POPA es una plataforma de formación digital en la que algunos de los referentes más importantes de las artes escénicas ofrecerán cursos magistrales donde compartirán sus conocimientos y sus experiencias.

El sonidista Gastón Briski, el escenógrafo Alberto Negrín, y Alberto Ligaluppi, ex director del Complejo Teatral de Buenos Aires, son los expertos argentinos que integran la lista de estetas y originales creadores. La lista es extensa y nutrida y se suman otras personalidades de las artes escénicas: Mónica Raya (vestuarista iluminadora y escenógrafa mexicana), Charlotte Mooney (Creating Contemporary Circus, experta en artes circenses), Nick Evans (director asociado de Billy Elliot y Jesucristo Supestar), Octavio Arbeláez (gestor cultural colombiano), Finzi Paska (director de la compañía que lleva su nombre), BT McNichol (director asociado de Sam Mendes en Cabaret, en la foto), el iluminador Albert Faura y Nils Lunow, quien ha participado de la construcción de teatros en Milán, Roma, Hamburgo, Berlín, Las Vegas y Munich y ha sido jefe de producción de El jorobado de Notre Dame, en Berlín. «Nos importa alumbrar mundos posibles», explica Cantón quien sumó a la plataforma creadores de diversos géneros escénicos –ópera, musical, circo, teatro de texto– e incluso creadores de las ceremonias de apertura de las olimpiadas. Sam Hunter y Julia Whittle, socias en Orange Jackets, son las expertas en este último universo, las responsables, por ejemplo, del cierre de las Olimpíadas de Londres, en 2012.

La fecha de lanzamiento de esta plataforma en ebullición es en breve. A partir de este punto de partida la «biblioteca» se irá poblando de más volúmenes de saber, es decir, de más experiencias y de más testimonios en forma de cursos on demand (el precio de estas clases aún está por definirse). Los impulsores de este proyecto idearon «módulos de conocimiento», es decir, una elaboración exhaustiva del proceso creativo de distintos realizadores, el detalle de los elementos con los que trabaja, cómo crean en función de los integrantes de cada espectáculo, como se distribuyen los ensayos, y un largo etcétera. También serán parte de POPA el diseñador de vestuario Fabio Namatame, el director de producción Patrick Murphy (productor ejecutivo de Moulin Rouge en Broadway), Paul Christ (director musical en el West End de Los MiserablesMiss Saigon, El fantasma de la Ópera y Mary Poppins), la coreógrafa y bailarina Lisi Estarás, y Aline Küppenheim, experta en teatro de marionetas.

«La idea es que aparezcan, cruces de profesionales, material útil para la comunidad artística, que la gente que ingrese lo haga no solo porque quiera tener un curso magistral, sino para formar parte de este universo. El proyecto tiene una gran ambición porque la comunidad artística es no solo muy amplia, sino indestructible», considera Pedemonti.

POPA no busca erigirse con un afán académico, pero como un puente para que quienes han tenido esta formación se acerquen a la experiencia de los máximos creadores en las distintas áreas. En inglés, en castellano y en portugués, comienzan a atesorarse estas experiencias en un proyecto que tiene a su vez un espíritu artesanal, personal, delicado, como cada función de teatro, viva, única e irrepetible. Agrega Cantón: «La idea es que estos conocimientos estén vivos, que no sea algo estático, que quien ingresa pueda asistir a este organismo que inspira».

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